Perrito se debate entre la vida y la muerte tras ser atropellado en el barrio San Remo de Ibagué

Una vez más el exceso de velocidad y la imprudencia causaron un hecho fatal en la calle de la Urbanización San Remo de Ibagué. (Ver: Vehículo que transitaba a alta velocidad, atropelló y mató a una mascota en Ibagué)

Un perrito, de raza Schnauzer, fue embestido por una camioneta el pasado 27 de diciembre, hacia las 11:30 de la mañana, provocándole heridas de gravedad que lo debaten entre la vida y la muerte.

“El conductor venía a alta velocidad y no tuvo precaución. Esto es muy frecuente en esta cuadra: no tienen respeto por la vida de las mascotas ni de nosotros”, manifestó Paula García, dueña de la mascota.

Y agregó: “fue horrible, el perrito llora y le parte a uno el alma. Queremos hacer una denuncia porque no hay respeto en esta calle”.

Estos hechos lamentables se han registrado porque la vía se encuentra en perfectas condiciones y sin un solo hueco, razón por la cual muchos conductores aprovechan para transitar por encima del límite de velocidad.

Por ese motivo, la comunidad había exigido a la Alcaldía de Ibagué la instalación de reductores de velocidad para controlar a los conductores imprudentes y así evitar los hechos lamentables como el de la perrita ‘Luna’ en septiembre, cuya muerte fue fulminante.

El exsecretario de Movilidad, César Yáñez, prometió colocar, en cambio, una señal de tránsito que indicara a los conductores la velocidad máxima para circular por allí, pero sus palabras, al parecer, se quedaron en el aire. (Ver: Una señal de tránsito: la solución de la Alcaldía para evitar accidentes fatales en el barrio San Remo)

"En el transcurso de este mes de septiembre se colocará una señal vertical, se va a decir cuál es la velocidad máxima en este punto, que tendrá que ser 30 kilómetros por hora", indicó en ese entonces el funcionario.

Sin embargo, con o sin ella, los residentes continúan preguntándose: ¿cuántas muertes más deben ocurrir para que instalen de una vez por todas dichos reductores?