Municipio retoma proyecto de la construcción de la USI en Picaleña en medio de la pandemia del COVID-19
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La pandemia generada por el coronavirus ha llevado a los alcaldes y gobernadores a tener nuevas y considerables fuentes de recursos de destinación específica para robustecer el decaído sistema de salud en las regiones.
El problema es cómo se gastarán estos dineros para que no se pierdan o despilfarren por el camino.
El alcalde de Ibagué, Andrés Hurtado, aseguró que debido a la pandemia se pudo obtener cerca de $27.000 millones que hacen parte del Fondo - COVID-19.
De acuerdo con el mandatario, estos dineros se van a destinar en la construcción de dos nuevas Unidades de Salud: la de Picaleña, proyecto gestado desde el gobierno anterior, y una nueva sede para la Comuna Ocho.
De igual manera, para adecuar los 20 centros de salud y ampliar la sede intermedia del barrio El Salado, donde se atenderán las citas prioritarias.
"Vamos a construir la Unidad de Salud de Picaleña, ya tengo los recursos para eso, estamos pensando en construir una nueva USI en la comuna Ocho y modernizar con una sede amplía la USI de la comuna siete del Salado. Vamos a invertir recursos por $17.000 millones ahorita en COVID y para infraestructura vamos a invertir al menos 10.000 millones más. Tendríamos casi $27.000 millones, con esfuerzo de recursos propios y 17.000 millones para todo el personal, insumo, mejoramiento de la infraestructura y consumo", dijo el Alcalde.
El propósito del mandatario es que la construcción de las dos nuevas USI inicien este año.
"Yo le he visto la cara buena a esto, hemos podido acceder a fuentes de destinación específica para mejorar nuestro sistema de salud porque antes lo que no era la prioridad hoy en día sí, por eso vamos a fortalecer las cuatro unidades de salud", concluyó el mandatario.
