El gerente (e) de la empresa Ibaguereña de Acueducto y Alcantarillado (Ibal), Mario Casas, pretendía desconocer o pasar por alto la resolución 558, emitida por la Corporación Autónoma Regional del Tolima (Cortolima), que ordenó en febrero de este año suspender de manera inmediata obras en la fase II del acueducto alterno.

EL OLFATO tuvo acceso a un audio en el que el directivo niega que a la empresa haya sido radicado un documento o requerimiento oficial por parte de Cortolima que ordene la suspensión de la instalación de la tubería del acueducto complementario. 

“Nunca, a la fecha de hoy nos ha llegado un documento o requerimiento oficial a la empresa en el cual diga que tengamos que parar, detener o suspender actividades de la construcción del acueducto complementario, eso no ha llegado.  Si hubiese llegado un documento oficial lo hubiéramos acatado tal cual por parte de Cortolima como lo hemos hecho hasta la fecha”, sostuvo Casas durante una reunión llevada a cabo el 5 de junio, con algunos habitantes de las comunas 12 y 13 del Sur de la ciudad.

Sin embargo, la resolución 558 fue comunicada y puesta en conocimiento del Ibal el 4 de marzo. 

La Autoridad Ambiental en el Tolima ordenó el cese inmediato de los trabajos en ocho frentes de obra del proyecto, que prevé la instalación de 18.9 kilómetros de tubería desde la vereda Laureles hasta la planta de tratamiento del Ibal en La Pola, en razón a que la empresa no ha cumplido con los trámites de solicitud de los permisos ambientales y la presentación del plan de manejo ambiental actualizado del trayecto.

Es de anotar que Casas, en la reunión se contradice cuando sostiene que la resolución 558 fue apelada a través de una acción judicial y que fue fallada el pasado 10 junio otorgando razón a la CAR frente a los requerimientos que debe cumplir el Ibal.

“La resolución fue apelada y está en proceso judicial, no está en firme, actividad o documentos judiciales que no estén en firme no obligan al Ibal a detener ningún tipo de actividades. No tenemos ningún documento por parte de Cortolima que nos obligue a suspender o parar  estas actividades de construcción”, advirtió el directivo.

El Juzgado Séptimo Civil Municipal negó la tutela interpuesta por el entonces gerente del Ibal, Carlos Fernando Gutiérrez, quien pretendía se declarara la nulidad la resolución 558 y que ordenaba el cese de actividades de construcción en ocho puntos del acueducto complementario. (Ver: documento 1)

El Ibal responsabilizaba a la CAR de haber afectado gravemente la posibilidad de cumplir con la construcción y operación del acueducto complementario para Ibagué; y brindar una solución definitiva a la problemática del abastecimiento de agua potable en los barrios del Sur.

Cortolima: la resolución está vigente

El director de Cortolima, Jorge Enrique Cardoso, dijo que la resolución 558 sigue firme, pues el fallo de tutela lo que hace es validar el proceso administrativo que ha llevado la entidad frente al control y vigilancia de la obra.

Cardoso reconoció que en el momento el Ibal, a través de los contratistas, ejecuta labores sin los respectivos permisos.

“En este momento Cortolima es consciente que se están ejecutando actividades que no están incluidas dentro del plan manejo ambiental y que no cuentan con los permisos actualizados”, dijo ayer Cardoso.

La fase II etapa I del acueducto complementario hasta el 5 de junio registraba un avance de obra del 77 %. El Ibal ya anunció la prórroga de tres meses para la entrega de las obras y que se proyecta para septiembre.