Vecinos de Bosques de Varsovia no soportan malos olores por rebose de alcantarillas

Desesperados y aburridos se encuentran los vecinos del barrio Bosques de Varsovia de Ibagué por el rebose de aguas residuales. 

De acuerdo con Óscar Murillo, un residente de la manzana E de este sector, esta problemática se ha agudizado durante los últimos dos meses, debido a las fuertes lluvias en la ciudad. 

"Así no llueva, todo el tiempo la alcantarilla está botando grandes cantidades de aguas residuales y se encuentran las dos cuadras inundadas. El olor es fétido, uno no se lo aguanta ni con las puertas y ventanas cerradas", relató el ciudadano. 

"Hace un año pasó lo mismo y no salía solamente agua sino desechos fecales, preservativos. Era muy incómodo porque la mayoría de personas que allí viven tienen niños pequeños y no podían dejarlos salir a la calle por esa suciedad", añadió.

Asimismo, mencionó que en el año 2014 un juez, a través de un fallo de tutela, le ordenó al Ibal hacer las respectivas intervenciones en la zona, pero la empresa no cumplió. 

"Cuando se constuyó el barrio el Ibal instaló unos tubos muy pequeños y no intervinieron la parte final de la vía para permitir que hubiera buena evacuación", explicó. 

"A nosotros nos dijeron que era difícil que la empresa arreglara eso porque es muy costoso (sería una inversión de $600 millones) y que por tanto preferían poner un abogado", agregó. 

Entre tanto, indicó que la semana pasada le solicitaron a la compañía ibaguereña que enviara maquinaria para destapar las alcantarillas, pero aún no ha acudido al lugar. 

Ibal dice que atenderá la situación 

EL OLFATO habló con Harold Rodríguez, director Operativo del Ibal, quien señaló que la próxima semana irán al barrio a verificar la situación. 

"Revisaremos la situación para darle solución a ese rebose y si el tema es un poco más crítico, igualmente vamos a ver cómo dentro de la programación que tenemos tratamos de intervenir en el menor tiempo posible", sostuvo el funcionario. 

Además, recordó que en buena parte de la ciudad las tuberías han llegado a su máximo tiempo de uso y por ende se presentan dificultades como hundimientos y reboses de alcantarillas. 

"Seguimos trabajando con el personal operativo y con mucho ánimo de tratar de darle solución en el menor tiempo posible a estas problemáticas", concluyó.