Los números buenos y malos de La Estación durante el primer año de la pandemia del COVID-19

El gerente del Centro Comercial La Estación, Efraín Valencia, hizo un balance sobre las pérdidas y ganancias que dejó el primer año de pandemia por el COVID-19.

En diálogo con EL OLFATO, Valencia afirmó que a pesar de que el 2020 no fue un año fácil, tienen la satisfacción del deber cumplido al recuperar el porcentaje de ocupación que tenían antes del Coronavirus. 

Asimismo, indicó que vendrán cambios en la aplicación de los protocolos de bioseguridad teniendo en cuenta la directriz del Ministerio de Salud y la Alcaldía de Ibagué. 

EL OLFATO: ¿Cómo ha sido este año de pandemia en La Estación?

Efraín Valencia: Ha sido un año de mucho aprendizaje, un año donde tuvimos que primero entender lo que estaba pasando para darle manejo y trasmitir a nuestros clientes la confianza necesaria para que nos siguieran visitando.

Las dificultades fueron grandes, pero en ningún momento fuimos inferiores a ellas, ya fuera desde nuestras casas o con el trabajo presencial nos organizamos a través de la metodología de las 5 C´s, que nos permitió canalizar nuestros esfuerzos en Colaboradores, Clientes, Comunidad, Costos y Caja.

No fue un año fácil, pero sentimos la satisfacción del deber cumplido.

E.O: ¿Mediante cuáles estrategias logró mantenerse ante el cierre constante de los establecimientos comerciales con los distintos toques de queda, pico y cédula, y confinamientos?

E.V: Para minimizar el impacto financiero nuestra operación tenía tres modelos: operación plena, otro con operación parcial y uno cerrado. Sobre cada uno de ellos nos ajustábamos de acuerdo con las medidas adoptadas por las autoridades y esto lo acompañábamos de un canal fluido de comunicación con nuestras marcas comerciales.

En el mismo sentido, la disminución de costos nos permitió transferir beneficios de descuento en las cuotas de administración según condiciones particulares, situaciones y circunstancias de cada tipo de actividad.

Los cierres y restricciones de cualquier tipo indudablemente afectaban porque así se hagan ajustes en costos, los fijos hay que asumirlos, pero se genera una incertidumbre entre los comerciantes y los clientes.

E.O: ¿Cuántos fueron los almacenes que tuvieron que irse del centro comercial?

E.V: Nuestro nivel de ocupación al inicio de la pandemia estaba por el orden de 95% y en su nivel más crítico estuvo al 84%. Sin embargo, al cierre del año ya habíamos logrado nivelarnos, cerrando con 94,6% y hoy en día con las negociaciones ejecutadas proyectamos en el mes de abril estar sobre el 97% de ocupación.

E.O: ¿En cuánto se redujeron sus ingresos?

E.V: Nuestra composición de ingresos está dada principalmente por tres líneas: la primera, las expensas de administración donde transferimos más de $1.500 millones en descuentos, lo cual impactó cerca del 30 % los ingresos por este concepto. La segunda línea corresponde a los ingresos por servicio de estacionamiento los cuales se afectaron en un 50%, y por último los ingresos comerciales que cayeron cerca del 60%.

E.O: ¿Cuánto valió la instalación de los protocolos de bioseguridad?

E.V: La inversión inicial estuvo por el orden de los $120 millones. No obstante, seguimos asumiendo costos mensuales de $5 millones entre personal, compra de insumos de desinfección, entre otros.

E.O: ¿Dieron facilidades de pago a los arrendatarios?

E.V: A nivel de arrendamientos la mayoría de los propietarios de locales dieron alivios y descuentos a sus arrendatarios bajo distintas modalidades, ya fuera descuentos directos, suspensión de pagos, pagos por porcentaje de ventas, entre muchos otros modelos. Esto complementó muy bien los esfuerzos que hicimos en los alivios por expensas de administración que se han venido dando desde abril y continúan a la fecha.

E.O: ¿Cuántos empleos se perdieron y cuántos lograron recuperar después de la reactivación?

E.V: De la planta de personal directa afortunadamente pudimos mantener todos los puestos de trabajo, en contratistas (aseo y seguridad) el ajuste estuvo por el orden del 20% de sus nóminas y directamente en las marcas. Lo que se perdió, prácticamente se recuperó, pero al no tener aún abiertos los cines y la totalidad de bares, mantenemos un déficit de empleos al cierre del ejercicio.

E.O: ¿Ya se envió la solicitud a la Secretaría de Salud para eliminar de los protocolos los tapetes y la toma de temperatura?

E.V: El Director Ejecutivo de la Asociación de Centros Comerciales de Colombia, el gremio que concentra la mayor parte de centros comerciales del país, ya remitió a la alcaldía municipal una propuesta para eliminar la toma de temperatura al ingreso de los complejos comerciales, ya que en un estudio realizado de julio a diciembre de 2020 se identificó que de 281 millones de visitas, se detectaron 269 casos con temperaturas mayores a 38 grados, lo cual demuestra que no es efectivo, a diferencia del lavado de manos, el distanciamiento y el uso de tapabocas que si son vitales para minimizar el contagio.

Sabemos que la Alcaldía de Ibagué, al igual que otras ciudades del país, están a la espera del pronunciamiento del Ministerio de Salud porque es este ente gubernamental quien define los lineamientos de los protocolos. Cabe aclarar que la toma de temperatura se continúa realizando en nuestras instalaciones, hasta tanto las autoridades no definan lo contrario.

E.O: ¿La apuesta deportiva que se ha venido realizando en la ciudad los ha favorecido de alguna forma?

E.V: Consideramos positivo que vengan este tipo de visitantes porque conocen la ciudad y siempre de la mano de la ocupación hotelera hay un fortalecimiento de la actividad comercial. Así en esta ocasión no sea en la misma proporción porque a estos deportistas se les ha tenido limitación en sus salidas.

De todos modos, su visita la hemos aprovechado porque hemos utilizado algunos mecanismos y modelos de venta a través de WhatsApp y otros canales.