El doctorado incumplido que dejó a un profesor de la UT con una deuda de más de $50 millones

En firme quedó un fallo de responsabilidad fiscal contra Félix Salgado Castillo, profesor de la Universidad del Tolima, luego de incumplir con un doctorado otorgado por la institución que causó un detrimento patrimonial de $50.440.086 millones. 

Así lo dio a conocer un reporte de la Contraloría del Tolima, el cual explicó que Salgado recibió una suma cercana a $42 millones por parte de la UT para adelantar un doctorado en Planificación y Manejo Ambiental de Cuencas Hidrográficas, el cual concluiría en 2015, pero cuyo título jamás demostró.

"Enterar al señor Félix Salgado Castillo en su condición de profesor de planta de la Universidad del Tolima, que debe consignar el valor del alcance fiscal a nombre de la Institución en la cuenta de ahorros o corriente y remitir copia de la consignación a la Dirección Técnica de Responsabilidad Fiscal de la Contraloría del Tolima", indicó el ente de control.

La historia

Para culminar sus estudios doctorales, Salgado contaba con un plazo de cuatro años (a partir del primero de septiembre de 2011 y hasta el 31 de agosto del 2015). 

Sin embargo, pocos días antes de cumplir ese plazo el profesor solicitó una prórroga de cuatro meses a la comisión de estudios para poder finalizar con éxito su posgrado.

El Consejo Académico de la Institución le concedió la petición al docente y extendió el plazo de entrega de su título académico hasta el 31 de diciembre del 2015.

No obstante, a finales del año 2016, el profesor manifestó la imposibilidad de entregar el título académico, pues según él “no había podido concluir la redacción del documento final de su trabajo”.

A pesar de esta situación, en julio de 2017, Salgado quiso beneficiarse del Acuerdo Nº 017 en el que la UT concedía un plazo adicional de 24 meses a los docentes de planta que aún no habían entregado sus títulos de posgrado.

Sin embargo, el docente no fue beneficiado con esta amnistía, pues pese a que cursó siete de los ocho niveles que conformaban el doctorado, perdió su calidad de estudiante porque no realizó registros de matrícula por un periodo cercano a los dos años, dejándolo en deuda con la Universidad del Tolima y sin estudios doctorales.