El día que el expresidente Uribe propuso que las Farc llegaran al Congreso

Uno de los argumentos de Álvaro Uribe Vélez en contra del acuerdo de paz de La Habana es que los jefes de las Farc podrían llegar al Congreso de la República. Sin embargo, es necesario recordar que el expresidente, durante su segundo mandato, también propuso que los guerrilleros obtuvieran curules como primer paso para iniciar un eventual diálogo de paz.

Desde que el Gobierno de Juan Manuel Santos anunció hace más cuatro años que ya se había entablado una mesa de diálogos con las Farc, el expresidente Uribe y su partido Centro Democrático han criticado de manera incansable que el Estado llegue a un acuerdo con el grupo insurgente. (Ver: Después de 52 años de conflicto armado, Gobierno y Farc logran un acuerdo de paz)

Y mientras se iban revelando algunos puntos del acuerdo entre el Gobierno Nacional y las Farc, el expresidente empezó a hablar de impunidad y se mostró en total desacuerdo con que los máximos jefes del grupo guerrillero pudieran obtener curules en el Senado y la Cámara de Representantes. 

Pero la posición de Uribe con respecto a la posibilidad de que guerrilleros de las Farc ocupen curules no siempre ha sido igual. Y sobre ello existen dos pruebas documentales que están circulando en redes sociales y que pertenecen a medios de comunicación como Noticias Uno y Caracol Radio. (Ver: Junio 23 de 2016: el día en que el Gobierno y las Farc sellaron el fin del conflicto)

En el año 2006, poco tiempo después de haber iniciado su segundo periodo en la Presidencia de la República, Uribe Vélez dijo que era necesario eliminar todos los obstáculos para que los guerrilleros pudieran llegar al Congreso. 

"Si un acuerdo de paz exige que vayan al Congreso, eso hay que removerlo, ese obstáculo habrá que removerlo en una norma constitucional", afirmó Uribe Vélez.

De igual manera, el expresidente Uribe también manifestó que debía realizarse un marco especial para sortear las dificultades jurídicas que conllevaría el indulto por delitos de lesa humanidad que hubiesen cometido los jefes de la guerrilla, tal y como hoy en día se establece en el acuerdo de La Habana. (Ver: Diez mitos sobre el acuerdo de paz que circulan en redes sociales)

"Por ejemplo, la Ley de Justicia y Paz nunca pretendió alterar lo que hay en el ordenamiento jurídico que prohíbe la amnistía y el indulto para los delitos atroces. Seguramente en un acuerdo de paz con la guerrilla eso habrá que llevarlo a un texto constitucional", dijo Uribe.

Asimismo, en un informe de Noticias Uno también se puede escuchar al expresidente Uribe hablando de la necesidad de modificar la Constitución Colombiana para permitir que los guerrilleros pudieran ocupar una curul en el Congreso de la República. 

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"El país tiene que estar preparado, si se da un proceso de paz, para hacer unos cambios en el ordenamiento jurídico, que seguramente van a tener que estar insertados en el nivel constitucional, y eso empieza a crear la necesidad de una asamblea constitucional o constituyente, para ese momento, que tendría que ser previa dejación de armas", aseveró Uribe.

Por supuesto, con respecto a la propuesta del expresidente Uribe, el actual proceso de paz guarda bastantes similitudes en cuanto a los beneficios políticos que deberían recibir los guerrilleros en un posible escenario de post-negociación.

Quizá una de las diferencias más importantes con el actual proceso es que Uribe proponía una Constituyente, mientras que el mecanismo de refrendación de los acuerdos de La Habana será el plebiscito. (Ver: Esta será la pregunta del plebiscito por la paz del próximo 2 de octubre)

Actualmente, el acuerdo de paz entre el Gobierno Santos y la guerrilla de las Farc también incluye un marco jurídico especial para blindar un posible escenario de post-negociaciones, e incluso se establece la creación de un Tribunal Especial para la Paz que será el encargado de juzgar a los autores de crímenes de lesa humanidad. (Ver: ¿No tiene tiempo para leer todo el acuerdo de paz? Aquí lo puede escuchar)

Así las cosas, solo resta esperar a que los colombianos comprendan los alcances y limitaciones del acuerdo y decidan el próximo dos de octubre si aprueban o no el contenido del texto final.