El aporte y el valor de la mujer en la familia y en la sociedad
En este mes de marzo se hace especial mención a la mujer, resaltando sus cualidades y virtudes, es por ello que en este espacio es importante destacar el doble rol que desempeñan las mujeres, en primer lugar, desde el cuidado de la familia y además en su propósito de fortalecer la economía del hogar.
Frente al rol productivo de la mujer, el mercado laboral en Colombia presenta el siguiente panorama: En promedio para el año 2020, las mujeres presentaron un desempleo de 20.4% y los hombres 12.7% lo cual significó una brecha del 7.7%. En suma, la tasa de ocupación es de 38.8% para las mujeres, frente a un 61.8% de los hombres, significando una brecha de 23.5%.
En este contexto, es evidente la falta de participación de la mujer en sectores productivos. A esto se suma la coyuntura de la pandemia en la cual las mujeres, han debido asumir una doble carga de cuidado en sus hogares por causa del confinamiento lo cual les restringe aún más las posibilidades de inserción laboral o de emprendimiento.
Por otra parte, los sectores y actividades que más emplean mujeres, están relacionados con el comercio, restaurantes y servicios, los cuales han reducido su demanda repercutiendo directamente en la posibilidad de emplearse.
En este sentido, llevamos ya 21 años buscando acciones concretas de reconocimiento y participación de la mujer en todos los ámbitos. Comenzamos por instituir el sistema cremallera, que es la participación paritaria de hombres y mujeres dentro de nuestras listas. Ejemplo que ha permitido que hoy al menos un 30% de mujeres deban componer las distintas instancias de decisión en el poder público.
Por otra parte, se ha logrado consolidar en las corporaciones, mediante un trabajo en equipo entre los distintos actores políticos, nuestra participación a través de la conformación de comisiones especializadas. Sin embargo, debemos extendernos a este contexto que hoy se nos muestra problemático, que es precisamente lograr sentar las líneas de una economía más equitativa.
Es por ello, que una de nuestras líneas priorizadas, es precisamente trabajar dentro de uno de los sectores en donde la brecha se hace más aguda, el sector informal. Con este objetivo logramos sacar adelante la Ley 1988 de 2019, comúnmente llamada Ley Empanada, que busca beneficiar a los vendedores informales del país, y en el que se dejó fijado un eje transversal de equidad para que las mujeres logren superar condiciones de pobreza, necesidades básicas y promuevan su rol productivo en la sociedad. Esto con el fin de desarrollar sus capacidades y garantizar su estabilidad económica. Así mismo, buscamos promover en las empresas y en el sector público igualdad en materia salarial entre hombres y mujeres.
Este enfoque es fundamental, y esperamos seguir extendiendolo en los distintos ámbitos y sectores. Es desde el marco de un reconocimiento integral de la mujer, como parte esencial de la sociedad y la familia; tanto por sus talentos naturales para la estabilidad y el cuidado, como para la generación de ingresos; que podremos dignificar y exaltar el valor de la mujer; y entonces continuar desarrollando un escenario propicio y real de admiración a sus valores y respeto integral.
Nos corresponde a todos como sociedad, seguir trabajando hombro a hombro, en equipo, hombres y mujeres; para la consecución de estos logros prometedores hacia ambientes favorables en los que le demos a todas las mujeres plenas garantías para su realización personal; teniendo en cuenta que son las mujeres las orientadoras, desde nuestra infancia, de nuestros valores espirituales y sociales para vivir en una sociedad armónica. Forjadoras de hogares que nos han motivado a alcanzar siempre la mejor versión de nuestras vidas.
Por ello hacemos una invitación muy especial a todos los colombianos, para que visibilicemos y le demos ese valor a la labor de las mujeres en sus familias y comunidades; no solo en este mes sino cada día del año.